Todo empezó con una sencilla idea: decidimos que nuestra pasión iba a ser nuestra forma de vida. El diseño, que siempre había tenido una presencia omnipotente en nuestras vidas, debía convertirse en un objeto activo de ellas. Era una reflexión muy simple y muy evidente pero, como es de esperar, su ejecución no lo podía ser tanto.

 

Por difícil que se antojara nuestro proyecto, era inevitable llevarlo a cabo. Nos surgían muchas preguntas: ¿sería un problema nuestra corta edad?; ¿cómo podíamos hacer nuestro diseño accesible al mercado?; ¿quién estaría interesado en él?... La clave consistió en convertir estas amenazas en oportunidades.

 

Somos jóvenes, entusiastas, con una creatividad desbordante y absolutamente enamoradas de lo que hacemos. Eso es suficiente para hacer que el diseño que ofrecemos sea de calidad. Pensamos que el mercado estaba cada vez más lleno de personas que, como nosotras, tienen algo que hacer y que ofrecer al mundo pero que difícilmente se ajustan al perfil profesional convencional. ¿Quién mejor que estas personas para convertirse en nuestros clientes?

 

De esta base nace Omelette. De la necesidad de ofrecer un servicio básico a quienes más lo necesitan y menos se lo pueden permitir. Nuestro trabajo se caracteriza por ser, ante todo, accesible. Queremos estar cerca de nuestros clientes y poner a su disposición un trabajo de calidad adaptado a sus necesidades y, sobre todo, a sus bolsillos. Sabemos que el diseño no debe limitarse a los grandes estudios para grandes clientes y que todos los clientes, por pequeños que sean, merecen un diseño gráfico profesional.

 

Por eso, nuestra especialidad es el desarrollo de identidad corporativa, el branding y el restyling. Porque queremos que nuestros clientes tengan todo lo que necesitan para crecer, de una forma fácil y apropiada, ya sea ayudándoles a saber quiénes son o permitiéndoles refrescar lo que siempre han sido.

 

Omelette es el resultado de nuestra vitalidad y ganas de hacer lo que mejor sabemos: diseñar. Es la forma que tenemos de ofrecer nuestros servicios gráficos al mundo. La posibilidad de que nuestro trabajo, cercano, único y asequible, esté a disposición de quienes realmente lo necesitan. Omelette es uno, uno para todos.